Detrás de los populares anuncios televisivos, cuya imagen visible es el glamuroso George Clooney, las máquinas de café Nespresso han tardado muchos años para conseguir el éxito.
La patente de la tecnología del sistema la adquirió Nestlé en el año 1974, y no sería hasta el año 1995 que se lograría rentabilidad. Durante todo ese tiempo se estuvo trabajando en orientar el producto al mercado objetivo, aspectos técnicos (problemas y costes de producción, variabilidad de la calidad del café), canales de distribución, etc. A partir de entonces gracias a las inversiones en publicidad y a una buena estrategia, Nespresso se ha convertido en líder mundial del café en cápsulas. Sin duda uno de los elementos clave del producto es su sencillez, tanto en diseño como en usabilidad, y es que se ha convertido en una de las divisiones más rentables y de mayor crecimiento de Nestlé.